Cómo ajustar correctamente la mochila de senderismo
En el senderismo la elección de la mochila adecuada es esencial, pero saber cargarla y ajustarla correctamente es igual de importante. Al fin y al cabo, incluso la mejor mochila va a resultar incómoda si no está bien ajustada. Acá vas a encontrar seis consejos para ajustar de manera apropiada tu mochila de senderismo.
1. Aflojá todas las correas y cargá la mochila.
En primer lugar, aflojá las correas para los hombros (o tirantes), el cinturón lumbar y la correa del pecho, así como todas las correas de compresión y estabilizadoras de peso de la mochila.
Ahora llenala con tu equipamiento habitual. Si estás probando la mochila en un Salomon Store, agregá peso que simule una carga similar.
2. Ajustá el cinturón lumbar.
El peso de la mochila debe distribuirse cómodamente entre la pelvis, la zona lumbar y los hombros. Ponete la mochila y ajustá el cinturón lumbar, que debería quedar justo por encima de los glúteos.
Algunas mochilas también cuentan con pequeños estabilizadores de carga en la base del cinturón. No te olvides de apretarlos para estabilizar la mochila.
3. Ajustá las correas para los hombros.
Una vez listo el cinturón lumbar, ajustá las correas de los hombros hasta notar una distribución equilibrada y cómoda del peso entre la parte superior e inferior de la espalda.
Ajustá la longitud de la mochila a tu tronco. Si la longitud de la mochila es ajustable, una característica que se encuentra con mayor frecuencia en las mochilas de senderismo y de viaje de gran volumen, ajustala hasta que las correas de los hombros se ajusten perfectamente a la forma de tus hombros. Si la mochila es demasiado larga, los tirantes no se apoyarán en los hombros y todo el peso de la mochila recaerá en la parte baja de la espalda. Si es demasiado corta, el peso se concentrará en tus hombros y la mochila te resultará incómoda.
4. Ajustá la correa del pecho.
La mayoría de las mochilas de senderismo están equipadas con una correa de pecho (también llamada correa de esternón) que une las dos correas de los hombros. Si podés ajustar su altura, ponela en la parte superior del pecho. Ajustá la correa del pecho hasta colocarte cómodamente las correas de los hombros y hacer que la mochila se ajuste perfectamente a tu espalda sin dificultar tu respiración.
5. Ajustá las correas estabilizadoras de peso.
La mochila podría estar equipada con dos pequeñas correas en la parte superior de los tirantes. Son las que estabilizarán el peso. Ajustalas para acercar la parte superior de la mochila a tu cuerpo y evitar que bamboleen con el movimiento. De este modo, la mochila será más cómoda y el peso va a estar mejor balanceado.
Situadas detrás de los hombros, estas correas no siempre son fáciles de encontrar con la mochila puesta, así que no dudes en pedir ayuda a tus compañeros de excursión.
6. Ajustá las correas de compresión.
Una vez que las correas de los hombros y el cinturón lumbar estén bien ajustados, sacate la mochila y ajustá todas las correas de compresión. Tené cuidado de no ajustarlas demasiado o podrías dañar el contenido de la mochila. Al comprimir la carga, vas a estabilizar aún más tu equipamiento para evitar que se balancee durante el desplazamiento.
Asegurate que todos los bolsillos de la mochila estén bien cerrados. Si necesitás anclar algo a la parte exterior de la mochila para llevarlo colgado, como unos bastones de trekking o una botella de agua, asegurate de sujetarlos bien para que no se muevan o, peor aún, caigan durante la excursión.
Y, ¡listo! Tu mochila ya está correctamente ajustada y estás listo para disfrutar al máximo de tu excursión. ¡Te deseamos suerte!